Conocido como Igloo City, este hotel está hoy día abandonado. Nunca se terminó de construir y sea por falta de dinero o propósito, quedó como parte de la geografía de Alaska desde 1970.
Lo que pretendía ser un revulsivo para la zona, terminó en enero del 2007, cuando Igloo City cerró sus puertas a los visitantes... Hoy, es simplemente una curiosidad arquitectónica, emplazada en una de las infinitas y bellas panorámicas de Alaska.
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